Buenas!
A ver si antes de que llegue el fin de semana liquido ya las entradas de las rotaciones.
Pues la siguiente rotación fue por Oncología. En la teoría, era la única asignatura del segundo cuatrimestre que me llamaba la atención. Sin embargo, me decepcionó un poco. Pensaba que el día a día de un oncólogo era distinto y no me gustó mucho la oncología médica. Quizás también pueda deberse a que roté con algunos médicos que no me cayeron muy bien, y esta es una de esas ocasiones en las que te influyen para mal, y hacen que descartes esa opción.
La especialidad.
En realidad, son dos. Oncología médica y Oncología Radioterápica.
¿Qué tipo de especialidad son? Pues viene implícito en su nombre. La médica, es médica. y la radioterápica, consiste en pautar radioterapia. Esta división es necesaria porque el campo de la oncología es tan grande que un solo especialista no puede abarcarlo todo. Es más, habría que hablar aquí también de la cirugía oncológica. Es decir, cirujanos que se especializan en tratar quirúrgicamente el cáncer. Por lo que si alguien entra en medicina con la idea de querer curar el cáncer, o dedicarse a la oncología.... tiene varias vertientes para hacerlo.
En resumen:
Oncología médica: se aborda el cáncer con quimioterapia/inmunoterapia.
Oncología radioterápica: se aborda el cáncer con radioterapia.
Cirugía oncológica: se aborda el cáncer con cirugía.
Aquí es donde viene el lío. Porque ningún caso es igual, y aunque hay mil protocolos, lo que le funciona a un paciente, puede ser fatal para otro. Así que habrá enfermedades que necesiten sólo uno de los abordajes y otros que necesiten los tres. Es por esto por lo que existen los comités. Uno para cada tipo de cáncer, en el que se reunen todos los especialistas implicados (oncólogos, cirujanos, especialistas de la rama médica del tumor, radiólogos, patólogos...) y comentan caso por caso el abordaje más idóneo para ese paciente. Es algo que merece la pena ver, así que si os invitan a uno mientras estáis de prácticas, no dudéis en ir.
Las prácticas.
¿Qué hace una estudiante de medicina en un sitio como este? Estuvimos una semana en oncología médica y otra en radioterápica.
La semana de oncología radioterápica consistía, primero en un tour por la planta, en el que uno de los radiofísicos nos explicó la teoría, cómo colocaban a los pacientes, el funcionamiento de las máquinas, como "pintaban" los TACs para delimitar la zona exacta y la cantidad de radiación que tenía que recibir...
Un mundo a parte. Me quedé anonadada con toda esa tecnología. El acelerador, que es el que veis en la foto, es lo que administra el tratamiento. Y es a la vez PET/TAC, se ajusta él solo milimétricamente si el paciente se ha movido de su posición fijada y...
vamos, que es una pasada. No le estoy haciendo justicia con esta entrada.
Cada paciente tiene su máscara o rejilla de tratamiento, personalizada, que sirve para que no se mueva y para establecer unas medidas reproducibles y exactas, para que la radiación siempre llegue al mismo sitio.
El tratamiento dura muy, muy poco. Casi todos los pacientes que pasaban estaban allí una media de 5 minutos. Me lo imaginaba más largo y pesado.
Bueno, espero que haya quedado claro que es una pasada y que parecía cosa de otro mundo. Después de esto, cada uno se iba con su médico asignado a pasar consulta. Básicamente, la consulta de este especialista consiste en ver a los pacientes antes o después de la sesión de radioterapia, y ver cómo lo van tolerando, si presentan efectos secundarios y demás.... Cuando terminan el tratamiento, tienen consultas de revisión para ver si ha hecho efecto o no. Si es un caso nuevo, según los protocolos diseñan ("pintan en el TAC") el tratamiento y lo mandan a los radiofísicos para que lo comprueben.
Cada adjunto está subespecializado en varios tumores. En mi caso, estuve viendo pacientes con tumores ORL o de próstata, en su mayoría. Hubo un día que me dejaron quedarme por la tarde, y estuve con los técnicos (que son los que supervisan la máquina), que me explicaron un montón de cosas y fueron muy amables conmigo.
La semana de oncología médica, se dividía en consulta y planta. Y aquí fue cuando di con los adjuntos que no me cayeron bien, o vi que su día a día no me llamaba la atención. Hago un inciso para hacer justicia a algunos adjuntos, entre los que se encontraba el Jefe de servicio, que fueron una maravilla. Eran súper amables, te dejaban explorar a solas, y se implicaban activamente en que sacaras algo productivo de esa mañana. Grandes médicos que disfrutaban de su profesión y eran muy empáticos.
Sin embargo, había otros que eran bordes por sistema. Los pacientes lloraban en su consulta o no hacían nada por consolarles... no se detenían a hablar con ellos o en preguntarles si tenían alguna duda con respecto al tratamiento...
Básicamente, la consulta oncológica hace lo mismo que la de radioterapia: supervisa al paciente antes y después de la administración de la quimioterapia. Todos los pacientes tenían que acudir con una analítica hecha previamente, y si todo estaba correcto, se les administraba la quimioterapia. Pero me pareció mucho más fría y aburrida que la consulta de radioterápica. Quizás se deba a que me caía genial la de RT, y mal el de médica.
En la planta, tuvimos la mala suerte de dar con una adjunta que le sobrábamos. Pero literal. No nos hizo ni puñetero caso. Le preguntabas, y le costaba horrores contestar. A la vez que nosotros estaba uno de los residentes de Interna, y le hablaba a él en términos médicos muy específicos para que no nos enterásemos de lo que hablaban. Menos mal, que el resi de interna era un amor, nos imprimió el pase de planta y nos hizo todo el caso que no nos prestó la otra mujer. Esa parte fue genial, pero volvíamos a estar en interna, y no en oncología, que era de lo que se trataba.
En fin.... por lo menos tenemos la suerte de que esta fue una de las excepciones del curso, y que en general todos intentan tratar a los estudiantes lo mejor posible.
¿Qué me llevo de esta rotación?
- Desilusión, por la parte de la oncología médica. Pensé que estos, entre todos los médicos, deberían ser los más humanos, compasivos y empáticos de todos. Y he visto que no es así (aunque tiene que haber de todo y como ya os dije hay grandes personas en este servicio).
- Descubrimiento de la radioterapia. Lo veía como algo muy doloroso, y muy horrible. Quizás esté muy sesgado por los tipos de tumores que vi. Pero me encantó toda esa tecnología y el abordaje terapéutico.
- Que cada paciente es un mundo. Intentamos generalizar siempre. No hay enfermedades, sino enfermos. Y en la oncología, esto me parece una máxima universal.
- En ocasiones, no le he encontrado el sentido. Aunque el paciente no vaya a curarse o no vaya a adquirir una mejoría en su calidad de vida, se administra el tratamiento igualmente. Y sin hablar sobre ello. Me parece que reina la conspiración del silencio en estas situaciones. En ocasiones, me ha parecido falsa, y creo que todavía hay mucho paternalismo en esta especialidad.
¿Futura especialidad? No sé. La radioterapia me llamó mucho la atención, y entra dentro de mi top 10. No la descartaría. Sin embargo, la oncología médica me ha defraudado. El cáncer me llama mucho la atención, pero más desde la perspectiva preventiva y diagnóstica, no desde la terapeútica. Me gustaría que mi día a día consistiera en prevenir el cáncer, y si no es posible, hacer todo lo que esté en mi mano para descubrirlo cuanto antes. Estar atento a esos signos y síntomas, para que no vaya a más y se pueda diagnosticar en etapas tempranas. Y veo que eso en la oncología no sucede, pues el paciente ya te viene diagnosticado y le quita parte del proceso "interesante", en mi opinión.